La entrevista de trabajo es una instancia clave para escoger y/o ser escogido. Es una oportunidad que no debemos desperdiciar y para la cual debemos estar bien preparados, aunque a priori el trabajo no nos parezca el más interesante.

Es mi responsabilidad, preguntar y repreguntar, e investigar, para recién ahí definir si quiero o no trabajar en una determinada empresa, es mi deber asegurarme que el lugar que estoy escogiendo es el más adecuado para mis intereses profesionales y personales, actuales y futuros. No se trata sólo de sueldo y beneficios, se trata de muchas otras variables que debemos tomar en cuenta y que llamamos “factores críticos”.

Estos factores son tangibles (distancia, sueldo, tipo de empresa, industria, entre otros) e intangibles (valores, estilo de liderazgo, calidad de vida, respecto al medio ambiente, entre otras)

La entrevista es una forma estructurada de comunicación interpersonal, que tiene como objetivo obtener información relevante para la toma de decisiones respecto de un candidato. El entrevistado debe ir preparado para exponer las ventajas o fortalezas del producto que ofrece y responder adecuadamente a las objeciones que se le presenten. 

¿Qué busca el entrevistador?

  • Detectar las cualidades del candidato.
  • Analizar su historia laboral y personal
  • Descubrir si tiene la capacidad para cumplir con los requisitos del cargo y sus proyecciones.
  • Compatibilidad del postulante con la empresa (cultura, jefatura, clima, estilo, etc…).

Tal como ya se ha dicho, un buen entrevistador busca el CALCE entre las necesidades actuales y futuras de la empresa y las que el candidato busca para sí mismo, es decir la mejor superposición entre los QUIERO, PUEDO y SOY de ambos.

¿Qué actividades puedo hacer ANTES?

1.- Saber si la entrevista es de selección o de decisión, ya que esa simple distinción puede hacer una gran diferencia.

En la Entrevista de Selección, las preguntas están orientadas a definir posibles candidatos para llenar un cargo sobre el que tienen una descripción general. Son las reuniones previas al paso siguiente, que es la entrevista con el empleador y por lo mismo, debe cuidarse en extremo, siendo breve en sus respuestas y teniendo una actitud amplia y positiva.

Por otro lado, la Entrevista de Decisión es habitualmente dirigida por su futuro jefe, el no siempre está entrenado para entrevistar y por lo mismo puede estar más nervioso que usted. Este entrevistador tiene 3 preocupaciones; saber si usted PUEDE, QUIERE y ES, esta última tomando en consideración la cultura, valores, estilo, etc, de la compañía. Es posible que tenga más de una reunión de este tipo, y que sea entrevistado por otros ejecutivos para dar el visto bueno final.

2.- Investigar a la compañía, al entrevistador y al empleo.

Las empresas son mucho más que estadísticas y en general, si conocemos el nombre de la compañía, se puede llegar a más de un conocido en la red de contactos, que pueda dar información respecto estructura, tamaño, cultura, rentabilidad, niveles de sueldo, estilo de liderazgo, tipo de vestimenta formal o informal, clima, etc. que si bien es información sesgada, es muy importante tener algo sobre lo cual partir. También es muy útil investigar en la página web y buscar a la empresa y sus ejecutivos en internet.

Ojala pudiera averiguar ¿Por qué está la vacante? ¿Cuánto tiempo lleva? ¿Qué se espera del cargo? ¿Si es nuevo o no? ¿Qué pasó con la persona que estaba? Pues eso también aporta información que le permite colocarse en la situación correcta.

3.- Prepare Preguntas Inteligentes

Estas preguntas permiten comprender mejor las necesidades ocultas de su futuro jefe y de la compañía, conocer a la persona que será su jefe y lo que es más importante; ser capaz de validar a esa compañía como un lugar dónde usted querría trabajar.

Si a usted le interesa el clima organizacional; prepare preguntas que respondan su inquietud, por ejemplo; ¿Cuál es la antigüedad promedio de las personas que aquí trabajan? ¿Qué tipo de estudios de clima hacen? Si las dudas están en la autonomía; pregunte por el estilo de dirección, por cómo se toman las decisiones, quién y cómo se define el presupuesto, entre otras.

Recuerde que sus preguntas deben ser adecuadas al tipo de empresa en la que está y validadas según la capacidad de contestarlas que observe en su entrevistador. No haga más ruido del necesario si la empresa no le interesa.

En general; le recomiendo que no pregunte acerca de vacaciones, licencias médicas, o beneficios en una primera reunión. Si lo siguen llamando; ya habrá oportunidad de aclarar esos tópicos.

4.- Póngase en el lugar del otro

Si tiene suficiente información, e incluso si es escasa; relea el aviso o los datos con que cuenta y use su empatía para anticipar el tipo de preguntas que le podrían hacer, de modo que también pueda anticipar respuestas posibles. Busque sus lados débiles para el cargo y encontrará una fuente casi inagotable de preguntas que puede preparar.

Por ejemplo; si está postulando a un cargo inferior al que tenía…es obvio que le preguntarán ¿cuánto tiempo estará con nosotros? o ¿por qué está dispuesto a bajar de cargo?

5.- Prepare Referencias

Con mucha anticipación y sin tener en la agenda una entrevista, usted deberá decidir a quienes tendrá como referencia. Con cada uno de ellos, contáctese y asegúrese que dirán de usted. Mantenga relación permanente y fluida, avise cada vez que los dé cómo referencia para refrescar las ideas, estar más atentos y que reciban las llamadas pertinentes. (Artículo “Referencias Laborales” en www.kambio.cl)

6.- Presencia y Tiempo

Prepare la ropa con que irá con la debida anticipación y mírela con ojos críticos, en los detalles se hace la diferencia….cuellos, botones y manchas no son precisamente escasos.

Respecto el tiempo, si llega tarde no hay posibilidad de pasar a la fase siguiente; lo mejor es llegar 15 a 20 min. antes, tomarse esos minutos de relajo y estar por lo tanto, en las mejores condiciones posibles.

7. Anticipe Preguntas

¿Qué es lo que está buscando y cuáles son sus intereses?

¿Cuáles fueron sus principales logros? ¿De qué está orgulloso?

¿Por qué le interesa este proceso?

¿Hábleme de sus fortalezas? ¿Cuáles podrían ser sus principales aportes?

¿Cuál ha sido su mayor fracaso o dificultad  y cómo lo superó?

¿Qué debilidades debe mejorar y qué está haciendo al respecto?

¿Dónde se ve de aquí a 5 años?

¿Por qué tendría que escogerlo a usted?